En un maratónico debate, el oficialismo se mostró dispuesto a acotar los poderes especiales para Milei
La Cámara de Diputados inició la discusión formal del proyecto de “Ley de Bases” enviado por el Poder Ejecutivo al Congreso. En medio de una audiencia plagada de chicanas y duras críticas del kirchnerismo a los libertarios y sus aliados legislativos, el Gobierno dio indicios de que podría acceder a acotar la delegación de facultades al Poder Ejecutivo y precisar las áreas alcanzadas por las emergencias.
“Nuestro país no está en una situación grave, no hay que buscar culpables: las situaciones de crisis exigen respuestas de crisis“, argumentó Rodolfo Barra, procurador del Tesoro, en referencia a la delegación de facultades especiales, en una participación que motivó gritos del kirchnerismo.
Además, el exministro menemista se adentró en una explicación sobre el equilibrio entre la libertad y la autoridad, y alimentó su exposición con referencias históricas. “Aténgase al proyecto”, pedían a gritos los legisladores de la bancada de Unión por la Patria (UP), impacientes ante la larga teorización de Barra.
A su turno, el secretario de Energía, Eduardo Rodríguez Chirillo, quien participó de la elaboración del proyecto de “Ley de Bases y Puntos de partida para la libertad de los argentinos” junto a Federico Sturzenegger, defendió la declaración de emergencia y deslizó que, a pedido de la oposición, se la podría declarar por un año, con uno más de prórroga. “Lo estamos considerando para incluirlo en la versión final”, señaló.
“No se trata de que sea ni un cheque en blanco ni que se está pretendiendo cerrar el Congreso. Se está pidiendo cosas específicas en un plazo determinado, que podría ser más corto”, sumó Chirillo, a la vez que detalló: “El alcance es mucho más preciso de muchas declaraciones de emergencia que se han sancionado. Se ha tratado de ser preciso en las facultades que se están delegando”.
Cuando le tocó el turno de explicar la reforma judicial al ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, argumentó que la iniciativa se funda “en la situación gravísima en que está la Argentina”. Y sumó: “En ese marco se llega a esta situación actual donde la ciudadanía se expresó a favor de un cambio, con un Presidente que busca soluciones y quiere dejar atrás un modelo económico que no funcionó. En temas de Justicia, con un plan novedoso tendiente a tener un sistema procesal y penal adecuado”.
Entre los puntos más sobresalientes de la reforma en la Justicia, destacó el traspaso de la Justicia Nacional al fuero Federal así como la aceleración de los pliegos para cubrir las vacantes pendientes. Respecto de los límites al derecho a huelga, el ministro señaló que si las manifestaciones obstruyen la libre circulación de las personas “son un delito”.
Los bloques claves
Con el foco puesto en ser una “oposición responsable”, las bancadas Pro, UCR y Hacemos Coalición Federal se mostraron comprometidas en discutir la letra chica del contenido del proyecto de “Ley de Bases” con el objetivo de mejorar el texto para apoyar la iniciativa. No quieren mostrarse como obstruccionistas frente a un Gobierno que todavía goza de altos niveles de aprobación en la opinión pública. Si logran llegar a consensos con el oficialismo, este mosaico de 97 legisladores “dialoguistas” será la llave del quorum para los libertarios.
La bancada de 38 legisladores de La Libertad Avanza (LLA) es minoritaria en un escenario de alta fragmentación parlamentaria, lo que obliga al presidente del cuerpo, Martín Menem, a apelar a la negociación política en función de sumar los apoyos necesarios para que la iniciativa logre ser dictaminada, obtenga la media sanción y esté en condiciones de ser girada al Senado para su sanción.
Por eso, en el Gobierno ya hay algunos indicios que dan cuenta de que se dejó atrás la intransigencia de las primeras semanas, cuando tanto el Presidente como algunos de sus funcionarios se negaban a aceptar cualquier cambio en el texto de la iniciativa de 664 artículos. “Ganó la racionalidad. Hay cosas que se van a aceptar para mejorar las propuestas”, confiaron cerca de Menem, quien indicó esta mañana que “se ve un buen clima” en el Congreso.
Por su parte, tanto el bloque de Unión por la Patria, de 102 diputados, como el del Frente de Izquierda y los Trabajadores (FIT), de cinco, se encaminan a su rechazo en pleno. “Nos toman el pelo”, observó Myriam Bregman (FIT), quien fue aplaudida por el kirchnerismo, sobre la diversidad de temas que toca el proyecto de ley de 664 artículos.
El jefe de bloque radical, Rodrigo De Loredo, puso la lupa en la diversidad de temas que pretende reformar el megaproyecto de Milei. “¿Quieren que se aprueben estas herramientas legislativas para la marcha del gobierno? Estamos por momentos desconcertados. Algunas disposiciones son accesorias a la principal preocupación de los argentinos que es su devenir económico”, consideró. No obstante, destacó la actitud “rápida y colaborativa” de su bancada y se preguntó: “¿Estamos siendo usados para una estrategia que nada tiene que ver con las necesidades del país?”. No obstante, volvió a destacar que las propuestas del Gobierno “contarán con el apoyo de la UCR”, mientras que pidió que el Poder Ejecutivo se enfoque en la principal urgencia del país.
“No hay margen para Estados policiales en la Argentina”, subrayó a su turno el diputado kirchnerista Leopoldo Moreau. “Tienen que quitar el DNU. Busquen consensos políticos. Estamos dispuestos a discutir, lo que no estamos dispuestos es a ceder al Ejecutivo el poder del pueblo argentino”, indicó.
La delegación de facultades también fue el objeto de cuestionamiento por parte del bloque de Pro. La diputada Silvia Lospennato fue la encargada de explicar sus dudas respecto de este punto de la ley ómnibus y pidió que todas las emergencias que se soliciten “tengan bases claras y precisas”.
“No creemos en las autodelegaciones y las autoprórrogas de las emergencias. Lo hizo el expresidente de Alberto Fernández en clara violación de la Constitución Nacional. Pediremos que sea acotado el tiempo y que la prórroga no se dé por [decisión de] el mismo Poder Ejecutivo”, anticipó Lospennato. También pidió cambiar algunos de los puntos en la reforma de las competencias de la Oficina Anticorrupción. “Estamos de acuerdo en los puntos de la diputada Lospennato y vamos a considerarlos”, reflexionó Chirillo.
En tanto, la diputada María Eugenia Vidal (Pro) hizo foco en el capítulo de privatizaciones de la iniciativa de reformas, especialmente en la relativa a YPF. “Me parece que poner un listado tan amplio de empresas, con distintas categorías y valor estratégico amerita una explicación del Ejecutivo”, razonó.
El secretario de Energía se ocupó de responder este interrogante. “Todas las empresas no se pueden privatizar. Tienen que ser ordenadas y eficientizadas. Se pide que estén declaradas sujetas a privatización de acuerdo a la ley. Pero, para poder privatizar adecuadamente se tienen que ordenar”, precisó.
El diputado de la Coalición Cívica (CC) Maximiliano Ferraro, quien hoy forma parte del bloque presidido por Miguel Ángel Pichetto, Hacemos Cambio Federal, objetó la delegación de facultades y la declaración de múltiples emergencias. “Busca dejar en un plano decorativo al Congreso de la Nación. El Ejecutivo tiene que fijar una hoja de ruta y definir claramente cuáles son los temas a resolver en la urgencia que hoy atraviesa la Argentina”, solicitó.
Sobre el DNU
El legislador Martín Tetaz (UCR) consultó al procurador del Tesoro sobre la posibilidad de habilitar la discusión del contenido del DNU al incluir un artículo en la “Ley de Bases” que solicita su aprobación.
“El DNU es como una ley, puede ser derogado o modificado”, respondió Barra, quien argumentó que esta posibilidad “le da más herramientas al Congreso” para revisar la iniciativa.
Frente a esta respuesta, la diputada Carolina Gaillard (UxP) explicó el procedimiento detallado en la Constitución Nacional para ratificar o rechazar el DNU en bloque y chicaneó: “Hay bloques que están incómodos con rechazar el DNU”. “No se puede desmenuzar el decreto y trabajarlo en el marco de la ley ómnibus”, concluyó.
Tensión en el inicio de la discusión
Antes de que los funcionarios expositores comenzaran con su informe, la tensión escaló entre el oficialismo y los bloques de Unión por la Patria y el Frente de Izquierda y los Trabajadores (FIT). La cantidad de giros a comisión del megaproyecto de Milei y la falta de antelación sobre las personas informantes del Gabinete en las reuniones plenarias fueron algunos de los puntos que encendieron la discusión.
A pesar de que fuentes de la presidencia de la Cámara de Diputados habían señalado que la apertura de la reunión estaría a cargo de Menem, la terminó encabezando el diputado cordobés Gabriel Bornoroni (LLA), quien preside la comisión de Legislación General.
Bornoroni presentó a sus pares Nicolás Mayoraz (LLA) y José Luis Espert (Avanza Libertad), presidentes de las comisiones de Asuntos Constitucionales; y Presupuesto y Hacienda, respectivamente, y fijó un estricto cronograma de trabajo entre el centenar de legisladores que componen el plenario.
Tras este primer abordaje, el primer diputado en pedir la palabra fue el presidente del bloque de UxP, Germán Martínez, quien agradeció Bornoroni la posibilidad de exponer y recordó que Espert, durante la reunión constitutiva de la comisión que preside, se lo negó. Durante su declaración, cuestionó por escasa la cantidad de giros que se le asignó al megaproyecto del Ejecutivo y solicitó su ampliación. “Tengo que decir con precisión: tiene que venir el jefe de Gabinete, Nicolás Posse. Tiene que venir el ministro de Economía, Luis Caputo, a no ser que se quiera seguir escondiendo como durante el gobierno de Mauricio Macri. ¿Qué van a hacer con Federico Sturzenegger? Exigimos la presencia de los tres”, solicitó.
El diputado kirchnerista pidió, además, la posibilidad que ingresen a las reuniones plenarias agrupaciones sectoriales para, según señaló, “se puedan hacer oír”. Listó a organizaciones productivas, inquilinos, trabajadores de empresas sujetas a privatización y entidades pesqueras.
En tanto, la diputada Bregman (FIT) puso el foco en los dichos de Espert y cuestionó su nombramiento como presidente de una comisión. “Cuando uno dice cárcel o bala para alguien que se manifiesta está diciendo que uno de nosotros podamos terminar con una bala policial. Todas estas formas arbitrarias y prepotentes tienen que ver con el contenido. Solo con las formas antidemocráticas se pueden discutir este contenido que avasalla derechos”, denunció.
Ante el pedido de explicación del legislador y sindicalista Sergio Palazzo (UP) sobre los dichos del presidente Javier Milei en relación con la acusación de “coimeros” de un sector de los legisladores nacionales, la tensión escaló. “A mí no me va a acusar de coimero un presidente de la Nación”, señaló.
Este miércoles, en tanto, los diputados continuarán en el plenario de esas comisiones de 9 a 20, en un cronograma acordado por los titulares de esos tres cuerpos parlamentarios. Contará con la presencia del ministro del Interior, Guillermo Francos, de 9 a 12; de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, de 14 a 16; y el secretario de Finanzas, Pablo Quirno Lavigne, de 16 a 20. En tanto, el jueves asistirá parte del equipo del ministerio de Capital Humano y el ministro de Infraestructura, Guillermo Ferraro. Hasta el momento, no está prevista la presencia de Sturzenegger, Posse ni Caputo.
La Nación
